¡El conflicto comercial entre EE.UU. y sus vecinos más cercanos acaba de escalar! Este martes, Donald Trump cumplió su amenaza de imponer un asfixiante 25% de aranceles a México y Canadá, desatando una crisis económica que podría afectar profundamente tanto a estas naciones como a los propios Estados Unidos. En una jugada arriesgada, también duplicó los aranceles a China, llevando las tensiones comerciales a niveles peligrosos.
Los productos que más impactan a los consumidores estadounidenses, como automóviles, electrónicos y alimentos, ahora verán aumentos significativos de precios, lo que podría desencadenar una inflación aún más destructiva. Con más de $1.4 billones en bienes importados de estas naciones, el golpe será inmediato y contundente. Los empresarios y ciudadanos temen que esta guerra comercial se convierta en una tormenta perfecta, afectando la economía global.
México y Canadá ya se preparan para retaliar, con Canadá imponiendo aranceles a productos estadounidenses por $30,000 millones, mientras que China responde con tarifas sobre productos clave como pollo, trigo y maíz.
¿Será este el principio del fin de la cooperación económica en América del Norte? Trump, lejos de ceder, amenaza con más aranceles en los próximos días, incluidos nuevos impuestos a la madera y productos agrícolas. La pregunta es: ¿hasta dónde llegará esta batalla comercial y qué tanto impactará a las economías de todos los involucrados?