María Paula Zambrano fue una mujer luchadora y entregada a su trabajo; además, demostró coraje en cada paso que dio con el Cuerpo Oficial de Bomberos.
En más de cuatro años en la institución, se caracterizó por su valentía y don de servicio con la comunidad, tal como la describen sus compañeros:
“Se destacó por su compromiso, responsabilidad y amabilidad en el ejercicio de sus funciones”, expresó Jean Pineda, director del Cuerpo Oficial de Bomberos.
María Paula dejó huella en las personas que conoció y su memoria vivirá en cada gesto, sonrisa y chispa que tenía a la hora de enfrentar las difíciles tareas de su labor. Se trató de una mujer orgullosa de portar el uniforme y representar al organismo de socorro y rescate con la frente en alto.
“Siempre con las botas bien puestas, así la recordaremos y llevaremos en nuestros corazones. Dios te reciba en su Santa Gloria. Te amamos”, expresó su compañera Gloria García.
Lamentablemente, la salud de María Paula decayó cuando se encontraba prestando sus servicios en el partido entre el Deportes Tolima y América de Cali, donde sufrió un desmayo que posteriormente derivó en su repentino fallecimiento.
“A pesar de todas la maniobras y procedimiento médicos, lamentablemente falleció. Tenemos muchas impresiones diagnósticas, pero estamos con nuestro grupo de epidemiólogos de la Secretaría de Salud Municipal verificando cuáles fueron las causas y el análisis respectivo del caso”, explicó Liliana Ospina, secretaria de ese despacho.
Su legado
El padre de María Paula, Israel Zambrano, fue quien le inculcó el amor por la labor de los bomberos. Con sus más de 30 años de servicio, dio ejemplo a sus hijas y les enseñó el valor de proteger a los demás. Fue así como María Paula decidió formarse en esta profesión, para poder ayudar a las personas que atravesaran por emergencias.
“Toda mi vida crecí viendo el amor que le tiene mi papá a esta institución. Siempre nos inculcó el don de servir con mucho amor, a pesar de que nunca nos dijo teníamos que ser bomberas. A nosotras siempre nos llamó la atención, incluyo a mi hermana porque ella también es certificada pero no ejerce”, comentó María Paula durante un reportaje en noviembre de 2022 publicado en el sitio web de la Alcaldía de Ibagué.
Aparte de ser bombera, la joven era madre de Luciana Zambrano, de ocho años, quien admira la labor de su familia y expresa que también le gustaría ejercer esta profesión cuando sea adulta.
Durante su labor, María Paula enfrentó diversas situaciones complejas que marcaron su carrera: Vio familias perderlo todo en un incendio, atendió emergencias por inundación y los casos del ‘puente la vida’, la aferraron a servirle a la comunidad.
Finalmente, en aquella entrevista la rescatista aprovechó para incentivar a los jóvenes a ejercer esta labor:
“Ser bomberos es por vocación, es realmente el que le tiene amor a la comunidad y al servir; si lo quieren ejercer que lo hagan porque vale la pena. Es muy lindo y satisfactorio llegar a una emergencia y poder ver que los niños y las personas mayores lo ven a uno como un héroe”.