La reciente sesión informal de la Corte Constitucional dejó entrever que no todos los magistrados compartieron la decisión de no sesionar durante la vacancia. Algunos consideraron incluso dejar constancia de su desacuerdo, preocupados por cómo podría interpretarse esta medida.
Entre los magistrados que cuestionaron la decisión, hay quienes sostienen que la falta de antecedentes no debería limitar la acción del tribunal. Argumentan que la Corte tiene, precisamente, la facultad de crear jurisprudencia y tomar decisiones inéditas, y que muchas de las medidas más importantes de la historia judicial colombiana surgieron de la valentía de actuar donde otros tribunales no tenían experiencia previa.
La situación refleja tensiones internas y debates profundos sobre cómo ejercer la responsabilidad de un tribunal que debe equilibrar la tradición judicial con la necesidad de innovación. Para muchos dentro del alto tribunal, estos debates son parte de la esencia de la Corte, que no solo interpreta la ley, sino que también establece nuevos caminos y precedentes que afectan al país entero.
