La elección de Carlos Camargo Assis como nuevo magistrado de la Corte Constitucional estuvo marcada por la presión política y los cálculos estratégicos de distintos sectores. La abogada María Patricia Balanta Medina fue la principal contendiente que le presentó oposición durante la votación en el Senado.
El pasado 3 de septiembre, la Corte Suprema de Justicia incluyó su nombre en la terna sometida a votación en la cámara alta, terna que fue objeto de críticas por incluir únicamente a una mujer y por contener también el nombre de Camargo Assis.
Fuentes políticas señalan que el proceso estuvo influenciado por el Ejecutivo, que apoyó a Balanta Medina, interpretado por varios sectores como un indicio de cercanía de la jurista con el presidente Gustavo Petro. Aun así, Camargo Assis resultó electo, en un escenario descrito como un reflejo de los complejos equilibrios políticos en torno a la Corte Constitucional.
Por: Laura Cifuentes Barbosa