En este Día de la Madre, recordemos que el mejor regalo no se envuelve: se vive.
Acompañarlas, escucharlas, abrazarlas… estar presentes, como ellas lo han estado desde siempre.
No se trata solo de un día, sino de caminar con ellas cada paso del camino, así como ellas nos han guiado con amor incondicional.
Desde la Alcaldía de Melgar, celebramos su presencia, su entrega y su inmenso corazón. ¡Felicidades a todas las madres!
