El Papa Francisco mostró su preocupación por la grave situación de violencia en la región de Catatumbo, Colombia, donde los enfrentamientos entre el ELN y el Frente 33 de las disidencias de las FARC han dejado entre 60 y 80 muertos. Durante el rezo del Ángelus, desde la ventana del Palacio Apostólico en el Vaticano, el Papa pidió por las víctimas y expresó su solidaridad con los más de 30.000 desplazados a causa del conflicto.
La Defensoría y la Gobernación de Norte de Santander han confirmado que aún no se han podido recuperar todos los cuerpos debido a las difíciles condiciones en las zonas rurales. Además, la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) reporta más de 41.000 desplazados y 12.520 personas confinadas por la violencia en la región.