Entre cantos, colores y consignas de esperanza, mujeres feministas, maestros, la comunidad LGBTIQ+ y otros colectivos, se unieron en la III Cumbre de los Pueblos de América Latina y el Caribe para hacer oír su voz y reafirmar su apoyo al Gobierno de la Vida.
En este encuentro, que celebra la unidad, la diversidad y la resistencia de los pueblos latinoamericanos en el marco de la CELAC2025, las organizaciones sociales acompañaron al presidente Gustavo Petro con un mismo mensaje: el cambio es posible cuando se escucha al pueblo y se defiende la vida en todas sus formas.
La Cumbre fue una muestra de que la democracia se construye desde las calles, desde la educación, desde los cuerpos diversos y libres. Porque América Latina florece cuando sus pueblos se reconocen, dialogan y se abrazan.
