El abogado Jaime Granados, defensor de Santiago Uribe Vélez, presentó ante la Sala de Decisión Penal del Tribunal Superior de Antioquia la solicitud de impugnación contra la sentencia que condenó al hermano del expresidente Álvaro Uribe a 28 años de prisión por homicidio y concierto para delinquir.
Según trascendió, la defensa sostiene que la decisión judicial contiene vacíos que, a su juicio, afectan garantías fundamentales como el debido proceso y la valoración equilibrada de las pruebas. Granados insiste en que el fallo “no refleja de manera precisa” los elementos que, desde su perspectiva, permitirían demostrar la inocencia de su defendido.
La radicación del recurso marca una nueva etapa en un caso que ha generado fuertes reacciones en el país, no solo por la gravedad de los delitos imputados, sino por la relevancia política y familiar de su protagonista. Para Granados, este paso constituye un esfuerzo por abrir una segunda revisión, en la que espera que el Tribunal considere los argumentos técnicos y jurídicos que presentará en los próximos días.
Mientras la solicitud es estudiada, la defensa recalca que Santiago Uribe continúa en libertad, pues no existe medida de aseguramiento vigente. Sin embargo, el ambiente jurídico sigue cargado de expectativa: la decisión sobre la admisión del recurso será determinante para definir si el proceso avanza hacia una nueva instancia o si se mantiene la condena impuesta.
Este capítulo agrega otra pieza a un expediente que, más allá de su dimensión legal, sigue teniendo un impacto profundo en la conversación pública del país, en especial sobre los límites del poder, la responsabilidad individual y la confianza en las instituciones judiciales.