El embalaje está compuesto por alimentos no perecederos, kits de aseo, insumos médicos, agua potable, combustible y elementos de primera necesidad. El propósito es contribuir a aliviar la situación de familias damnificadas y al restablecimiento de la normalidad.
La carga fue clasificada por la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), en un trabajo articulado con la Armada de Colombia.
El envío de la ayuda a esta isla del Caribe se realizó a bordo del buque ARC Victoria, patrullero oceánico de la Armada de Colombia, una de las unidades más modernas de la flota naval colombiana, diseñada para operaciones de vigilancia marítima, control del mar y apoyo humanitario, que zarpó desde el puerto de Cartagena hacia Cuba.
La capacidad de transporte, autonomía prolongada y sistemas logísticos avanzados convierten al ARC Victoria en el medio ideal para el traslado de grandes volúmenes de carga y para misiones de asistencia en zonas afectadas por desastres naturales.
El Gobierno nacional reafirmó así su compromiso con la ayuda humanitaria y la cooperación internacional, fortaleciendo los lazos de hermandad y solidaridad que unen a los pueblos del Caribe.
